Su Carisma
El Carisma que la Madre Paulina ha recibido como un don de Dios y que nos ha legado como herencia, configura nuestra espiritualidad:
Unión con Dios en la caridad de modo que, totalmente entregadas a Él y buscando sólo su voluntad mediante una vida plena del Misterio de Cristo, entregamos la caridad de Cristo a todos en un servicios alegre y cordial.
La vida de las Hermanas de la Caridad Cristiana se puede definir desde la Eucaristía. Contemplando a Jesús Eucaristía y dejándonos transformar por su Palabra hacemos presente el Amor de Dios en el mundo.